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Estudio ISM/UNFPA revela comportamiento distinto en la formación de parejas jóvenes en las fronteras del MERCOSUR
En el marco del proyecto “Juventudes y Fronteras en el MERCOSUR” (ISM/UNFPA), que analizó una serie de datos sociodemográficos referentes a los y las jóvenes de ocho ciudades fronterizas del MERCOSUR, llama la atención los datos específicos sobre el estado conyugal y la formación de parejas.
Estos datos identifican varios elementos involucrados en el proceso de formación y disociación de familias que afectan a jóvenes entre 15 y 29 años de nuestras regiones fronterizas.
Estos datos entre ciudades tan cercanas revelan un escenario interesante para analizar temas como las uniones tempranas, maternidad, uso del tiempo de las juventudes, e incluso en torno a las tasas de disolución de uniones por divorcio.
Con base en los datos del estudio “Características socioeconómicas de las juventudes en las ciudades fronterizas del MERCOSUR”, se puede observar, en síntesis, que los y las jóvenes de las ciudades brasileñas se casan a una edad más avanzada, que las jóvenes de las ciudades uruguayas se divorcian (o separan) mucho más que las de otras ciudades, que los indicadores más altos de jóvenes casados/as están en Santana do Livramento (Brasil), que en Ciudad del Este (Paraguay) mucho más jóvenes se declaran “unidos/as”, o sea, en algún tipo de unión estable, pero sin matrimonio formal, y que en las ciudades paraguayas de Encarnación y Ciudad del Este, además de Salto (Uruguay), se destacan números importantes de uniones tempranas de niñas.
El estado conyugal claramente mayoritario para todas las ciudades y en todos los subgrupos de jóvenes es la soltería, con valores que van disminuyendo con la edad. En las ciudades uruguayas es donde se observan los menores niveles, en particular en las mujeres. El mínimo valor se presenta en Salto, donde el 55,8% de mujeres de 15 a 29 años son solteras.
Como contrapartida, estas ciudades son las que presentan mayores proporciones de jóvenes viviendo en pareja. El máximo es en Salto, donde el 33,7% de las jóvenes están casadas o unidas. En todas las ciudades y para todos los grupos de edad, sin excepción, las uniones superan ampliamente a los casamientos. La menor diferencia entre uniones libres y casamientos se observa en Ciudad del Este (en torno al 8%) y las mayores en Concordia y Salto (del orden del 17%). No parecen haber patrones vinculados al país de pertenencia.
Al comparar los valores de cada ciudad con su gemela pueden verse, como en la dupla Salto-Concordia, los valores son muy cercanos para ambos sexos, mientras que en la dupla Posadas-Encarnación solamente es similar la situación de las mujeres.
Uniones y Casamientos
Tanto las uniones como los casamientos son más frecuentes entre las mujeres, a excepción de Encarnación, donde los valores para los varones superan levemente a las mujeres. La incidencia de las uniones tempranas (ya sea casamientos como uniones libres) en las mujeres 15-19 son siempre preocupantes, pues tienen más probabilidad de conducir a embarazos adolescentes, que suelen asociarse a limitaciones en el desarrollo educativo o participación en el mercado laboral.
Cabe mencionar que estas situaciones están asociadas además a mayores niveles de exposición a la violencia física, emocional y sexual por parte de sus parejas. Los datos indican que la mayor incidencia de las uniones tempranas se observa en Encarnación (16,5%), Salto (10,2%) y Ciudad del Este (8,2%) – y son valores mucho más altos que para los hombres.
También se destacan los valores para “separación/divorcio” en las ciudades uruguayas, especialmente para las mujeres. Salto, con un 9,5%, y Rivera, con un 8,7%, superan, y mucho, a los demás. Le siguen Concordia, con 2,5%, las ciudades brasileñas, de Foz do Iguaçu y Santana do Livramento, con 1,8%, seguidas de Ciudad del Este (1,6%), Posadas (0,8%) y Encarnación (0,6%).
Los datos completos puede encontrar en la publicación (descargar aquí) y en el sitio del proyecto, www.ismercosur.org/juventudes